La Naranja alcanzó el «BONUS» de Bi campeonato.
El equipo tucumano tenia todo para alcanzar el título N° 11 y al caer en la última fecha utilizó una de las muchas herramientas que tenía para festejar. Con el bonus en el bolsillo por perder 38 a 34 (7 o menos de 7 dice el reglamento) se coronó campeón de la septuagésima edición del Campeonato Argentino de Rugby.
El andar del equipo tucumano a lo largo del torneo le permitió llegar al último partido, del formato que propicia el campeonato, con las alternativas de ganar y ser campeón, empatar y festejar o perder por menos de 7 y alcanzar el puntos bonus y dar la vuelta.
En medio de un partido complicado, se aferró a la ultima alternativa para coronarse bi campeón. No fue lo ideal pero cuando el titulo parecía escaparsele, los protagonistas del quince conducido por Molinuevo, Macome y Ternavasio, sacaron a relucir la mística Naranja y gritar campeón por segundo año consecutivo al obtener punto bonus.
La Naranja arrancó el partido de la mejor forma, presión, pasamano y try de Tejerizo al minuto de juego, pero de a poco por la ansiedad, las imprecisiones y los penales que cometieron le cedieron el protagonismo a las «Aguilas».
El equipo de Buenos Aires, conducido por Poet, metía mucha presión y era dinámico y profundo a la hora de atacar le quitó el protagonismo al dueño de casa y de a poco se hizo dueño del primer tiempo, incluso apoyando en el ingoal con el arma preferida de los tucumano, el maul.
El parcial 26 a 17, a partir de tries de Martínez y Camussio, mas la efectividad de Poet hizo que todos los presente en la «Catedral del Rugby tucumano» esperar{an que el equipo reaccionara y pasara a comendar las acciones.
En el reinicio de la batalla, los bonaerenses golpearon temprano y sorpresivamente, que mediante un try de Poet y Estelles sumieron a todos los presentes en una inimaginables situación para esta final.Así fue ya que a los 9 minutos Poet se imaginó un drop y terminó realizando un slalon que lo dejó de cara al try, tres minutos más tarde, cuando Tucumán buscaba ensamblar un ataque, una nueva impresición le permitió a Estelles realizar una corrida tremenda para dejar mudo a los espectadores.
El tiempo se consumía, llegaron las variantes, que como en todo el campeonato respondieron de la mejor manera al equipo, y Tucumán empujado por el público apeló al amor propio para buscar revertir la situación.
Luego de los 20 minutos, Pata Curello y Ahualli tomaron la bandera de la rebelión, empezaron a aprovechar los arranques de Manso para hacerse dueño de los rucks y de la guinda. Buenos Aires cómodo con el 38 a 17 intento frenar el empuje tucumano pero no tuvo en cuenta que Augusto López Salas no quiso pasar desapercibido en este partido y al igual que en Rosario 2013, con su increíble habilidad y velocidad empezó a dibujar una sonrisa en la cara de todos los tucumanos.
Luego de que el «Chino» apoyará esos dos tries, la Naranja se agrandó y fue por más, mediante el pick and go se instaló en territorio defensivo porteño y busco un nuevo try, la resistencia visitante generó un nuevo penal y Novillo aseguró el bonus.
Con solo cuatro puntos de diferencia el conjunto campeón buscaba revertir el marcador y en ese afán los sorprendió el final. De esta manera el quince tucumano saco a relucir esa mistica que encierra la «Naranja» para alcanzar el BONUS que le permita festejar el bi campeonato a pesar de la derrota.
Síntesis