Será héroe o villano
Martín Rodríguez Gurruchaga será nuevamente el pateador de Los Pumas ante Rumania, debido a la ausencia de Fede Contempomi mientras que Santiago Fernández irá de apertura, González Amorosino debutará en el Mundial de Nueva Zelanda.
Sensaciones ambiguas. Por un lado, la adrenalina, la ilusión, el deslumbramiento por debutar en un Mundial con la camiseta de los Pumas y, por el otro, la congoja, la angustia, la desazón por no haberlo hecho como él lo hubiera soñado. Claro, en su baustismo mundialista contra Inglaterra, la suerte le fue esquiva a . En total falló cinco penales -Felipe Contepomi erró el otro-, en lo que fue una noche negra para todos los pateadores en cancha, ya que el inglés Jonny Wilkinson, con toda su chapa encima, desvió la misma cantidad que Tincho. «Es cierto, pero ellos ganaron», tira en forma de resignación este rosarino de 26 años, que suma 11 caps en el seleccionado argentino, todos como titular.
Cuando se lo consulta acerca de si pudo sentarse a volver a ver las imágenes del encuentro, el hombre del Stade Francais es tajante: «no las vi ni tampoco las pienso ver. Tuve un mal día; ya está, ya pasó. La verdad es que en la entrada en calor pateé bien y, después, en el partido, no. Quizás los nervios me jugaron en contra, aunque los penales, salvo uno o dos, tampoco eran fáciles. Pero bueno, me tocó una noche mala, como le puede tocar a cualquiera».
En una entrevista con Scrum (leer noticia relacionada), el apertura inglés había declarado que en todo momento creyó que estaba pateando bien, pero que después las pelotas terminaban no entrando. ¿Y Tincho? «Sinceramente yo también sentí que pateaba bien, pero en algunos disparos no me agarró la comba; esa es la verdad. Pero ya está, ya pasó, ya me olvidé. No quiero ni volver a hablar del tema», explica.
–¿Cómo fue la contención del equipo?
-Hice el duelo solo. Mis compañeros me apoyaron en todo momento y me dijeron que me olvidara, que ya había pasado. Pero uno por dentro siempre siente la espina de haber quedado en deuda.
-¿Fue casualidad que todos los pateadores tuvieran una mala noche?
-No me fijo en eso, no le doy ni bola. Me tocó a mí y ya está. Ahora lo que tengo que hacer es doblegar el esfuerzo pateando a los palos porque se viene Rumania. Ahí veremos cómo andamos.
El Puma menciona al próximo rival del seleccionado argentino y, automáticamente, la charla abandona Dunedin para centrarse en Invercargill, la ciudad que recibirá el duelo. «Nuestra táctica va a depender mucho del clima, pero la idea es jugar un poco más por afuera, dándole juego a la línea. Sabemos que Rumania tiene un pack muy duro y que se va a hacer muy difícil jugar por ahí, por eso será importante tirar la pelota por afuera. No tenemos que caer en lo que quieren ellos», analiza el jugador, que frente a los europeos dejará el fondo de la cancha para desempeñarse como centro, posición que ocupó en sus primeras tres convocatorias al team argento (vs. Inglaterra, Gales y Escocia).
El staff técnico que comanda Santiago Phelan decidió que, para dicho encuentro, Martín se ponga la pilcha de primer pateador y que Marcelo Bosch sea el segundo «Aparentemente no es una cancha fácil; dicen que hay mucho viento. Y si es así trataré de no patear largo e ir a lo seguro. Si eso es muy complicado se irá al line y se cambiará el juego; y si hay que patear a los palos, se pateará a los palos», dice.
Antes de finalizar la charla, el back se despacha con una frase que, seguramente, le está dando vueltas por la cabeza desde el sábado pasado. «Uno en esto es héroe o villano», lanza, para después agregar: «esperemos que el sábado no se tenga que definir todo con una patada. Le tengo mucha fe al equipo y estoy seguro de que vamos salir a jugar mucho para que no depender de ese recuerdo».
-¿Y si se define con una patada?
-Me tocará asumir la responsabilidad a mí y, como dije, seré el héroe o el villano del partido.
Fuente: Scrum