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Las fallas en el tackle, los problemas para detener el maul rival y la ausencia de un pateador efectivo fueron los desencadenantes de la caída Pampa frente a Pumas por 44 a 37 en cuartos de final de la Vodacom Cup. Así se terminó la ilusión de reeditar el título conseguido en 2011.
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Otra vez dormidos comenzaron los dirigidos por Daniel Hourcade ante un rival que se mostró presto para aprovechar esas desinteligencias y que sometieron a los nuestros utilizando el maul como plataforma predilecta para llegar al ingoal. De esta forma, se pusieron al frente por 17 a 0 con dos tries del velocísimo Rosko Speckman y las patadas de Carl Bezuidenhout. ¿Qué paso luego de semejante impacto? Los Pampas sacaron a relucir su amor propio y, con más ganas que juego, lograron perforar la defensa para que Rodrigo Baéz desplome su humanidad en la zona roja, tras una buena incursión por el eje de Tomás Cubelli. Sin embargo, los problemas a lo ahora de mantener a raya a los picantes backs rivales se mantuvieron y fue el efectivo Carl Bezuidenhout –sólo erró una patada a las haches-, quien mostró sus cualidades ofensivas para desnivelar a Mariano Galarza y aprovechar su propio kick de rastrón para dejar las cosas 27 a 10. Pese a las desigualdades que exhibía el tanteador, la visita nunca se rindió y fue el medio scrum de Belgrano el encargado de mostrar la enjundia necesaria para revelarse contra el desarrollo y llegar al ingoal para establecer el definitivo 27 a 15 al cabo del primer tiempo. El complemento encontró a los argentinos con el espíritu renovado, ya que Martín García Veiga enseñó el camino de la remontada con la tercera conquista nacional, que no encontró el eco necesario en los kicks de Santiago González Iglesias que falló la conversión y un penal factible en la salida posterior. Pero cuando daba la sensación que los sudafricanos se quedaban, otra deficiencia en la marca le permitió al pilar Vincent Koch romper por el centro y apoyar debajo de las haches. Al toque Ramiro Moyano respondió con un try, aunque un penal del apertura y la posterior visita por el ingoal de Speckman sepultó cualquier intención de levantada. Ya sobre el final, Manuel Montero anotó su nombre en el ingoal que dejó la indisimulable sensación de que los Pampas se vuelven producto de sus propios errores. A pensar entonces en el futuro, ya que muchos de estos chicos se medirán con Inglaterra en junio y están lejos de lo que implica esa exigencia internacional.
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Fuente: Rugby Fun.com.ar